El negro siempre ha sido unos de los colores predilectos en decoración. Su aire distinguido y elegante lo ha hecho protagonista en muchos espacios de interior, pero ahora ha llegado el momento de salir a nuestros jardines, patios y balcones. Actualmente la relación entre el interiorismo y el paisajismo es cada vez más estrecha, colaborando para lograr hogares donde el espacio fluye desde el interior al exterior con un mismo hilo conductor. Debemos cuidar delicadamente el diseño de nuestros rincones abiertos al aire y para ello el color negro puede ser un gran aliado. Pero ¿cómo podemos hacerlo? A continuación os ofrecemos unos pequeños consejos para llevarlo a cabo con éxito.
Ideas para incorporar el negro en tu espacio exterior
No vamos a descubrir este color, pero esta claro que siempre es tendencia por su pulcritud, su elegancia y su sofisticación. Un color que integrado en cualquier lugar
no molesta a nivel visual ni de diseño y a su vez puede enderezar zonas monotonas y de grandes densidades de plantaciones. El negro es al final un elemento envolvente con el que podemos jugar con nuestros diseños. A continuación os mostramos algunas ideas con las que podremos darle un toque personalizado al exterior.
Crear un telón de fondo
Un fondo negro es el
contraste perfecto para el follaje. El tono oscuro ayudará a realzar el verde y creará una
sensación de espacio muy acogedora. Además, vas a conseguir un espacio mucho más sobrio con el que podrás incluir pequeños detalles de color eléctricos. Con este telón de fondo puedes haces de esta zona de una
extensión idéntica del espacio circundante.
Incluirlo con elementos secundarios
Quizás no queramos que este color sea el protagonista, pero sí que le dé
carácter a nuestro jardín. Puedes conseguirlo con unas
macetas, unas jardineras o
mobiliario de exterior que crearán una estructura glamurosa y se relacionarán perfectamente con la arquitectura.
Trasladar el interior al exterior, un espacio organizado
Si dentro de nuestro hogar hemos optado por este particular color, podemos aprovecharlo y llevarlo al patio,
difuminando el límite entre ambos espacios. La sensación de amplitud aumentará y el resultado será un ambiente elegante y coordinado.
No hay que excederse a nivel de mobiliario porque podemos llegar a cargarlo demasiado. Tenemos que considerar y adaptar nuestro espacio según las dimensiones y decidir si queremos que se convierta en un zona chill out o más bien para veladas más dinámicas.
Crear contrastes
Jugar con las tonalidades y crear juegos de claroscuros puede darnos muchas ideas que no pasarán desapercibidas. Por ejemplo, podemos colocar un pavimento claro sobre el que
disponer de macetas o muebles negros. Ganarán en notoriedad y el espacio tendrá una mayor sensación de exclusividad.
Conseguiremos un ambiente renovado, fresco y novedoso. A través del pavimento también podemos juagar con los contrastes junto con aquellos oscuros.
Colocar un elemento protagonista
Una pieza negra colocada estratégicamente en tu jardín atraerá la atención, pero este color hará que se integre perfectamente con el medio, sin dominar en exceso el espacio. Con este componente estableceremos una armonía que ayudará a
organizar todo el lugar. Además no tiene que estar en el medio como pieza central, sino que puede colocarse en el punto que creamos más conveniente.
Usar el color a través de materiales tradicionales
Los materiales nobles nos pueden resultar demasiado tradicionales para el toque que queremos aportar a nuestro exterior, pero tratándolos en color negro nos ofrecen una nueva versión de ellos mismos mucho más
contemporánea. La madera o la piedra pueden ser unos ejemplos perfectos.
¿Y tú cuál es tu idea para integrar este color a tu espacio? Cuéntanos tu opinión.